Parashat
Tazria-Metzorah (Cuando Concibieres-Lepra) Vayikra (Levitico) 12:1-15:33,
Haftarah Melakhim Sheni (segunda de reyes) 4:42-5-19; 7:3-20, Yeshayahu
(Isaias) 66:1-24, los protocolos de pureza de la madre al dar a luz un varon o
una hembra, los protocolos de la lepra y las ofrendas, la purificación del
hombre y la mujer por emisión seminal o menstrual, por Yohann Pinto.
Después
de unos días especiales, algunos alegres como la llegada del mes de iyyar 5780,
mes de la sanación y curación según sabios kabbalistas, y más en estos momentos
de la pandemia, y conmemoraciones de tristeza entre ellos el Yom HaShoah y la
conmemoración de los genocidios Armenio, Cristiano Asirio y el Griego Póntico,
esta parashat comienza de esta forma. “El Eterno habló a Moshé (Moisés),
diciendo: «Háblales a los Hijos de Israel, diciendo: Cuando una mujer conciba y
dé a luz un hijo varón, será impura por un lapso de siete días, como durante
los días de su separación será impura. Al octavo día, la carne del prepucio
será circuncidada. Por un lapso de treinta y tres días ella permanecerá
purificándose de su sangre; no podrá tocar nada sagrado ni podrá entrar al
Santuario, hasta que se completen los días de su purificación. Si da a luz a
una hija, será impura durante dos semanas, al igual que durante su separación;
y durante sesenta y seis días permanecerá purificándose de su sangre. Al completarse los días de su purificación
por un hijo o una hija, traerá a la entrada de la Tienda de la Reunión, al
sacerdote, una oveja dentro de su primer año como ofrenda ígnea y un pichón de
paloma o una tórtola como sacrificio expiatorio. La ofrendará ante El Eterno y expiará por
ella, y ella quedará purificada de la fuente de su sangre; ésta es la ley de la
mujer que da a luz a un hijo o a una hija. Pero si sus medios no le permiten
traer una oveja, tomará dos tórtolas o dos pichones de paloma, uno como ofrenda
ígnea y uno como sacrificio expiatorio; y el sacerdote le procurará expiación y
será pura».” Donde vemos aspectos interesantes entre ellos que comienza con
los protocolos de la pureza e impureza de la madre después de dar a luz un
bebe, sea hijo o hija, entendemos en la sociedad moderna que un nacimiento es
un acontecimiento muy hermoso, hasta en algunos aspectos estresante para padres
primerizos, incluso en Venezuela anteriormente era un acontecimiento con
sentimientos encontrados, para muchos un acontecimiento no solamente feliz sino
también afortunado, al punto de haber creado ciertas supersticiones en torno a ello,
entre ellos el de colocarle lazo rojo con azabache al bracito del bebe o del
bautizo casero del bebe, pero también ha sido para algunos, más que todo de
sectores vulnerables un acontecimiento desafortunado y triste, en algunos casos
producto de embarazo precoz o producto de violaciones, con consecuencias muy
serias y tristes, no solamente a la madre sino también al bebe inocente, o en
otros sectores una sorpresa inesperada pero en muchos casos positiva (más que
todo en parejas que han hecho de todo para poder tener hijos y conciben de
manera inesperada) pero manteniéndonos en la parashat, la madre tiene su
periodo de purificación, no solamente de la sangre de la menstruación sino también
de la sangre del parto, si era un niño en 8 días era circuncidado, y la madre tenía
su periodo de purificación por 33 días, y si era una niña su periodo era de 14 días,
más el doble de lo 33 días, hoy en día por los avances médicos, permiten que la
madre tenga un periodo de separación, de recuperación y reposo rápido, cómodo y
seguro.
Quiero acotar de esta párashat que muchos de su contenido,
han sido la base de los principios de las leyes de Taharat HaMishpaja (leyes de
pureza familiar) que le exige a la mujer que se purifique cada 28 días después
de la menstruación o cuando haya concebido un bebe, y si el hombre, el
masculino que a veces como animalito tiene algunos pensamientos …….sicalípticos
(para no decir otra cosa) debería de también someterse a la ley de taharal
mishpajah de purificarse de tal impureza, pero como se dice en Venezuela, es
harina de otro costal.
Los midrashim con la parashat tazria, menciona que el
comienzo de esta parashat con este fragmento en hebreo de este modo.
וַיְדַבֵּר יְהוָֹה
אֶל־מֹשֶׁה לֵּאמֹֽר: ב דַּבֵּר אֶל־בְּנֵי יִשְׂרָאֵל לֵאמֹר אִשָּׁה כִּי תַזְרִיעַ
El fragmento en
rojo si lo colocamos en fonética se lee vaydaber Adonay el moshe lemor:
daber el Bney Israel lemor ishah ki tazria donde se comienza con las
mujeres que conciben hijos, mencionándose a nivel midrashico, que H´hakadosh
barukh hu, siempre tiene misericordia, incluso con los no nacidos, así derrumbándose
la teoría pro-abortista que los fetos no tienen alma ni vida, ni pueden ser
considerados seres humanos, ya que según los midrashim el feto es protegido por
un ángel llamado laylah que bajo órdenes del creador le pide que traiga un alma
del Gan Edén, hasta el feto que está en formación, y de ahí se le enseña el
feto hasta su llegada a este plano, toda la torah, y desde el cielo H´conjunto
con los ángeles determinan el destino del ser vivo-humano- que vivirá en este
plano y como elevara su alma a través de sus buenas acciones.
Hay un aspecto
curioso, en las que a los niños se les da además de 8 días de purificación y en
el día octavo se le circuncida, se le da a la madre 33 días de purificación y
en el caso de las niñas es el doble 14 días de purificación de sangre y se le
da el doble de días que las del niño, en el libro Torat David del Rabí David
Pinto, menciona este interesantísimo aspecto de la diferencia planteada de este
modo “¿Y por qué las mujeres están exentas del estudio de la Torá y cumplen solamente
con aquellas mitzvot que no están limitadas por el tiempo, mientras que el
hombre incluso si tiene más ocupaciones que las que tiene la mujer en el hogar
debe estudiar Torá y cumplir con todas las mitzvot?
Si alguien trata
de explicar esto diciendo que las mujeres no poseen las cualidades emocionales
necesarias para el estudio de la Torá, podemos responder que hubo muchas
mujeres importantes a lo largo de la historia, tales como Débora la profetisa,
Bruria la esposa de Rabí Meir Baal HaNes o Mijal, la hija del rey Shaúl (Eruvín
96a) quienes se colocaban tefilín y respondían preguntas que los Sabios de sus
épocas no lograban responder. De esto se entiende que la mujer no tiene ninguna
dificultad intelectual para poder dedicarse al estudio de la Torá.” Mencionándose
en palabras resumidas, que la mujer por no tener problemas intelectuales para
estudiar torah y los midrashim que los hombres, son muchísimo más valoradas
dentro del judaísmo, mientras que el hombre es valioso, pero necesita de las
mitzvot para elevarse, incluso en los midrashim se menciona que los animales no
contaminan como los seres humanos, al morir sus cadáveres son impuros por un día,
en cambio los seres humanos, contaminan aun en vida, y su impureza dura 7 días,
por ello están los protocolos de purificación de la madre.
Después de su
periodo de purificación en las que no debían acercarse a la tienda del
encuentro o al Beth Hamikdash, daba en ofrenda por purificación ofrenda olah y
jatat al cohen y si no tenía dinero como para comprar animales selectos, podía adquirir
animales económicos y accesibles para el ceremonial de purificación por el
cohen después de su impureza del embarazo.
Otro aspecto que
toca esta parashat es la enfermedad de la lepra, en hebreo Tzara´at-צרעת- pero antes definamos ¿Qué es la lepra? A nivel científico-medico
definimos a la lepra como Enfermedad infecciosa crónica curable que provoca,
principalmente, lesiones en la piel y daños en los nervios. La lepra es un una
infección ocasionada por la bacteria Mycobacterium leprae. Afecta
principalmente a la piel, los ojos, la nariz y los nervios periféricos. Los
síntomas incluyen lesiones claras o rojas en la piel, sensibilidad reducida y
entumecimiento en las manos y los pies. La lepra puede curarse en un plazo de
entre seis y doce meses con un tratamiento compuesto por varios fármacos.
A nivel
científico la lepra es una enfermedad cutánea crónica, que sin tratamiento
pudiera ser mortal, pero una pregunta de reflexión seria ¿la lepra medica es la
misma lepra de la biblia? O ¿Por qué en muchas civilizaciones incluso en la
edad media le tenían terror hasta aversión a la persona con lepra? Vamos primero
a responder una de las preguntas, en muchas civilizaciones la lepra era motivo
de rechazo y de odio de la sociedad, ya que asociaba a la lepra con una vida
desordenada o sucia, en el sentido de que no se cuidaba la higiene de sí mismo,
en otro le tenía como una especie de enfermedad metafísica motivado a un
castigo divino, uno de los leprosos más famosos fue el rey Balduino IV de Jerusalén
que era conocido como el rey leproso, que gobernó durante las cruzadas, además
muchos discriminaban a los leprosos al colocarlos en lugares específicos o para
ser cuidados por especialistas en el tema o dejarlos simplemente morir de la
enfermedad como animales, en Venezuela no estuvo exenta de tal situación,
incluso, en Maracaibo hay una famosa isla donde estaba los leprosos recluidos
lejos de la sociedad sana, conocido como la isla de la providencia (incluso
tenia además de hospital para enfermos de lepra, tenía tienda de comida, un
pequeño cementerio de leprosos fallecidos, casas de familias leprosas, hasta tenía su propia moneda conocida como
leprocomios, con los que los leprosos compraban comidas medicinas o los
servicios básicos), donde estaba un hospital donde trataban la lepra, hasta la
llegada de un científico venezolano, que trajo a través de un experimento con
un animalito llamado cuspón, una vacuna contra la lepra, ese científico se llamaba Jacinto Convit
Z´L-QEPD que revoluciono con su estudio el tratamiento de la lepra. Y en cuanto
a la segunda pregunta la respuesta es de cierta forma ambigua, ya que la lepra
de la biblia además de tener origen físico (como la lepra a nivel medico), tenía
también un origen espiritual, ya que era causado por chismes, mal-habladurías,
blasfemias, idolatría que hacían que la lepra no solamente llegara a la
persona, llegara a la casa, a las pertenecías y a los seres queridos.
En el hombre y en
la mujer hay ciertos tipos de pureza, que están asociadas a la sexualidad de
manera sana, entre ellas en el caso de la mujer de la menstruación, que en
muchas tradiciones se le asocia con su transición de niña a mujer hasta de la
capacidad de fertilidad, y en el caso del hombre el de emisión seminal cuando
tiene esos pensamientos algo….para no decir otra cosa… O cuando tenía algún pequeño
problema físico u hormonal, en esos casos se les pedía que se purificaran en la
mikveh, y se mantuvieran alejados por 7 días, hoy en día, están las toallitas
sanitarias o para el hombre (en mi opinión personal esta posición tiene muchísima
polémica ya que contradice las mitzvot de la torah) la práctica del onanismo
como forma de bajar la presión, y ejercer una sexualidad sin riesgos, si los médicos
y los ginecólogos y/o urólogos, analizaran esta parashat tendrían tesoros de recomendaciones
y aspectos que mejorarían el aspecto médico.
Fuentes
Torah Emet
El Midrash Dice
Torat David.
Diccionario Medico.
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